Villena: poeta antiimperialista y proletario

Por Orestes Eugellés Mena

 Una peregrinación a la tumba donde descasan los restos del poeta antiimperialista y proletario Rubén Martínez Villena se efectuó en la necrópolis de Colón de La Habana este viernes, 16 de enero, Aniversario 81 de su desaparición física.

Dirigentes de la Central de Trabajadores de Cuba y los Sindicatos, junto a los afiliados, colocaron  ofrendas florales en el lugar, en recordación a la destacada figura revolucionario que luchó desde las filas del Partido Comunista en defensa de los intereses de la clase obrera.

Rubén Martínez Villena apoyó a la unión de los sindicatos en una sola central: la Confederación Nacional Obrera de Cuba (CNOC), fundada por el  lider gráfico antiimperialista cubano Alfredo López Arencibia.

Villena fue fundador de la Liga Antiimperialista y de la Liga Anticlerical, participó en el Primer Congreso Revolucionario de Estudiantes, colaboró con Julio Antonio Mella en la creación de la Universidad  Popular José Martí, y en 1927, ingresó en el Partido Comunista de Cuba y fue miembro de su Comité Central.

El movimiento sindical cubano  recordó  al destacado poeta como el asesor de la CNOC, organización unitaria del proletariado cubano de la que se convirtió en el máximo orientador.

Tras la muerte de Julio Antonio Mella en 1929,  Villena se convirtió en el más activo y en el principal dirigente del Partido Comunista de Cuba.

Desde esa responsabilidad, organizó y dirigió l primera huelga política de la historia de la isla que estremeció los cimientos del régimen  del dictador Machado, movilización que paralizó el país durante más de 24 horas.

Al fallecer, su cadáver fue tendido en el salón de catos de la Sociedad de los Torcedores de La Habana por donde grandes masas de obreros y campesinos desfilaron toda la noche, junto la guardia de honor realizada como tributo a su persona.

La muerde de Rubén Martínez Villena coincidió con la culminación del IV Congreso Obrero, y a su entierro  asistieron todos los delegados  al evento con sus credenciales y estandartes de los sindicatos, seguidos por más de 20 mil trabajadores de los diferentes sectores quienes acompañaron a Villena hasta su última morada.