Triste muestra de defensa de Derechos Humanos

Por Orestes Eugellés Mena

Con tristeza recorre el mundo la información de que una mujer de 51 años de edad será ejecutada en  los Estados Unidos a pesar de las duras críticas por parte de Derechos Humanos e instituciones progresistas del orbe.

Pero lo que más molesta e hiere la dignidad humana  es que  los lemas propagandísticos del Gobierno estadounidense en defensa de los Derechos Humanos en otros países del mundo, principalmente en las naciones que luchan contra la explotación del hombre por el hombre y la por la desaparición del neoliberalismo.  

Conocimos del  informe emitido el lunes por el Centro de Información de la Pena de Muerte de Estados Unidos, que Kimberly McCarthy, anteriormente declarada culpable por un tribunal en el estado de Texas (sur), será ejecutada  mediante inyección letal, no por la gran prensa de Estados Unidos que si el caso hubiera sucedido en Cuba o Venezuela defenderían hipócritamente los Derechos Humanos en estos paises. 

Según informaciones, McCarthy será la segunda persona estadounidense condenada  este año, y de acuerdo con las cifras oficiales, desde hace más de tres décadas, cuando se reactivó la pena capital en Estados Unidos, más de 1,300 personas han sido ejecutadas en todo el país.  

Llama mucho la atención, en especial en Latinoamérica, la ejecución de mujeres, incluso de enfermos mentales, en el país de las barras y estrellas como Estados Unidos, lo que demuestra la falsedad con que aparece como gendarme de los Derechos Humanos.