España pierde hasta siete posiciones en el ranking económico mundial

Por Orestes Eugellés Mena

La crisis ya ha extendido su factura: ha hundido a España en los ránking internacionales, tanto en los calculados en función del volumen total de la economía como en los que miden el PIB per cápita.

La clasificación en dólares corrientes, la que usaba el Ejecutivo de Zapatero para situar a España dentro de la Champions League mundial, muestra la caída más abrumadora de todas: España pasará de ser la octava potencia del mundo al inicio de la crisis en 2007 a la decimoquinta en 2017, el último ejercicio computado en las previsiones del FMI, que se han usado como base para estas estimaciones. Se trata, por tanto, de 7 posiciones en sólo una década.

Esta popular medición que se usó en la arena política no es, sin embargo, la más rigurosa, pues al calcularse en dólares corrientes es muy sensible a la variación de los tipos de cambio. Esto provoca que una brusca oscilación del euro pueda alterar los volátiles resultados. Para eliminar ese problema y filtrar las distorsiones generadas por la inflación, se usa la medición en paridad de poder de compra, que arroja también una pérdida progresiva de influencia: de la duodécima posición de 2007 se pasará también a la decimoquinta en 2017.

Durante esos diez años, España habrá sido adelantada por Corea, Canadá e Indonesia. Sólo logra dejar atrás a Turquía en ese periodo computado, aunque la diferencia se irá estrechando progresivamente.

Para encontrar un declive parecido al español hay que buscar en Italia. Aunque mantendrá un lugar más privilegiado en el ránking, en 2014 saldrá del ‘top ten’ mundial, al ser adelantada por México. En 2015 aún bajará otro lugar al ser sobrepasada por Corea.

Por último, la clasificación en función del PIB per cápita en paridad de poder adquisitivo muestra conclusiones similares. Según este ránking, que permite comparar cifras teniendo en cuenta qué se puede comprar en distintos países con un mismo billete de dólar, España pasará del puesto 26 del año 2000, o del 27 del año 2008, al 29 en 2017. Una vez más, es el peor registro en este siglo.

(Con información del diario Expansión y Cubadebate)