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Sindicalísimo

Grecia: Triunfo de la dignidad Escrito por Arnaldo Musa

Publicado por Orestes Eugellés Mena

La campaña de chantaje y miedo, abonada por disensiones, no pudo ante la decisión mayoritaria del pueblo

Sí, nada está resuelto, porque ahí sigue indemne la injusta y abultada deuda de los buitres especulativos y financieros abrumando a Grecia, pero el NO a las demandas de los acreedores ofrece un nuevo valor a aquellos que desde el poder enfrentan a la poderosa troika neoliberal que ha sumido en la miseria a la mayoría del pueblo.

Lo más increíble de esto es que el gobierno de la coalición de izquierda Syriza, encabezado por Alexei Tsipras, nunca expresó deseo alguno de abandonar la Unión Europea, dejar a la zona euro y no honrar la deuda contraída, aunque en condiciones razonables y honorables, al revés de lo dicho en la propaganda de los buitres liderados por los jerarcas alemanes, que tienen comiendo en su mano al Banco Central Europeo (BCE) y la Unión Europea UE, y manejan los hilos del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Por eso se ha indicado repetidamente que “la Merkel tiene la llave”, dando pábulo a la influencia de la Canciller alemana sobre la cuestión.
Incertidumbre queda mucha, por supuesto, porque la pobreza está ahí, y el triunfo de la democracia económica, como lo logró Syriza, pudiera ser boicoteada por los poderosos partidarios de la austeridad y el ajuste neoliberal, por mucho que maniobre Tsipras.

La política de la malvada “troika” ultracapitalista (BCE, UE y FMI) desmanteló la negociación colectiva de los trabajadores, hizo caer el salario real en 17,2%, subir el desempleo al 26% (el 50% entre los jóvenes), y disminuir el ingreso nacional en 5%.

La pensión mínima de los jubilados cayó bajo el umbral de la pobreza, que ya afecta al 36% de la población y el 44% de los niños.

Tanto el decrecimiento público como el privado es resultado de la política de austeridad que allanó el camino para hacer aumentar a su manera los intereses de los fondos especulativos para destrozar la vida de los trabajadores, empleados, jubilados y desempleados.

Por ahí se inventaron medidas para presuntamente salvar la economía griega, aceptada por anteriores gobiernos, que lo único que hicieron fue aumentar los beneficios de los bancos, principalmente los alemanes, en detrimento de los ciudadanos griegos, que cargan con todo el peso económico.
Lo más grave de esto es que esta deuda tiene claros indicios del ilegal aprovechamiento ante el “dejar hacer” del Banco Central Europeo.

Fue un procedimiento similar utilizado por los fondos buitres amparados por Estados Unidos contra la economía argentina, en una de las maniobras desestabilizadoras contra el gobierno de Cristina Fernández.

En el caso griego -sintetizando- ,el origen de la deuda con el BCE se debe básicamente a la compra de bonos griegos en el mercado secundario que realizó esa entidad durante la etapa de la crisis de la deuda y el primer programa de “ayuda” a Grecia impulsado por la Troika entre el 2010 y el 2012.
Fíjense: de los 55 000 millones de euros de deuda con el BCE; Grecia ya ha reembolsado una suma mayor a los 28 000 millones, quedando unos 27 000 millones. El  “ladronismo legal” es tal que Atenas tendría que pagar en este julio y agosto venidero 6 600 millones de euros, y más de 20 000 millones en lo que resta de este año y los próximos cuatro.

La palabra ladronismo no es utilizada por gusto, porque el BCE ideó sistemas de transmisión monetaria para servir a los intereses del sistema financiero privado, permitiendo a los bancos franceses y alemanes deshacerse de los bonos griegos que tenían en sus balances. Así el BCE compró esos bonos por debajo del valor nominal con los elevados intereses  que fueron colocados.

O sea, nunca terminaría la adquisición de más deudas para pagar la deuda, que solo se haría en una pequeña parte a cambio del sacrificio del pueblo, entregándolo a la miseria.

De ahí lo importante de este triunfo de la dignidad en el referendo convocado por Tsyriza, donde la inmensa mayoría votó por el NO a las condiciones de los acreedores, todos unos buitres que deben haberse revuelto en ira con la prevalencia de la esperanza sobre el miedo.

Tomado de Cubasi

 

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